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| La pérdida de sensibilidad moral que provoca el hábito del aborto hasta transformarse en una psicopatía que incluye el infanticidio, recuerda la indiferencia con la que suelen observarse- aun durante las comidas- tragedias de la vida diaria por televisión.
Hace pocos días en Buenos Aires transmitieron en directo un terrible accidente en el que un transporte de pasajeros aplastó a un niño de 5 años frente a su madre. Los pasajeros varones y mujeres de distintas edades, bajaban del vehículo y se los veía llorar sin consuelo ante a lo irremediable. La tragedia era real y no el entretenimiento que presentan miserables morales. El perdón a los pecadores junto a la aversión hacia el pecado no obliga a aceptar la criminalidad impuesta. Pero por encima de cualquier confusión con actuales fundamentalismos, la legalización: del aborto, del matrimonio homosexual con capacidad para adoptar menores (¿consecuencia de la desacralización de la sexualidad en el matrimonio?), de la supresión de los derechos de los niños, del homicidio de embriones, de la corrupción de instituciones, de la extorsión, del trabajo esclavo, del abuso financiero, científico y tecnológico, de la comercialización de tóxicos adictivos y de órganos y terapias clasistas, de la explotación sexual, de la tortura, de la persecución religiosa, etc. nos está asegurando un futuro temporal muy violento.
Edited by chenter - 1/8/2010, 21:42
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